Desde la terminación del conflicto en el 2016, 657 miembros de las Fuerzas Militares han sido víctimas del uso de artefactos explosivos improvisados.
Tras conocer los recientes hechos en los que seis militares del Ejército Nacional fueron asesinados con explosivos en Puerto Libertador, Córdoba, la Corporación MilVíctimas manifiesta su preocupación por el recurrente uso de métodos y medios de guerra ilícitos, como política de los grupos armados organizados al margen de ley, vulnerando los Derechos Humanos y representado un grave riesgo no solo para la Fuerza Pública sino también para las personas y bienes protegidos por el Derecho Internacional Humanitario en Colombia.
La flagrante violación al Derecho Internacional Humanitario, después de las firmas de los acuerdos, ha sido un hecho recurrente, que se evidencia en los 657 militares victimas de uso de artefactos explosivos improvisados desde el 2016, y 86 uniformados asesinados en estos hechos, siendo las disidencias de las Farc y el ELN los máximos responsables del uso de estos métodos y medios de guerra ilícito. El departamento que mayor a representado una amenaza para la vida de la población y los uniformados, es Norte de Santander; tan solo en este departamento el ELN y las disidencias de las FARC han dejado 232 militares victimas de minas antipersona, siguiendo Nariño con 103 y Arauca con 101.
El clan del Golfo y las disidencias
El hecho ocurrido ayer pone en evidencia la ofensiva que los grupos armados organizados en el norte del país, han emprendido en contra de la población civil y la Fuerza Pública. En el departamento de Córdoba el Clan del Golfo, con su estructura Carlos Vásquez, unido a la estructura 18 de las disidencias de las FARC, han dejado desde 2019 hasta hoy, con el empleo indiscriminado de explosivos, 11 víctimas en las Fuerzas Militares, siendo las poblaciones de Tierra Alta y Puerto Libertador, las más afectadas por estas prácticas ilícitas de guerra.
Con estas acciones, las disidencias de las Farc, el ELN y el Clan del Golfo, violan el principio de distinción, base del DIH, así como también el Principio de Limitación, utilizando métodos y medios que no son permitidos por el Derecho de la Haya.
Estos datos alarmantes sobre el crecimiento de casos de violaciones al Derecho Internacional Humanitario en Colombia, se suman al llamado de las víctimas de medios y métodos ilícitos de guerra, a ser reconocidos por la Justicia Transicional con la apertura del macro caso que cobije estos terribles hechos ocurridos en el marco del conflicto armado interno y aun presentes en el país.
La Corporación MILVÍCTIMAS hace un llamado enfático a los organismos y países garantes de la implementación de los acuerdos, para que rechacen y definan acciones de respaldo a los militares víctimas, quienes antes y posterior a la firma de los acuerdos, continúan siendo los principales blancos de ataques indiscriminados por grupos armados organizados.
Hacemos un llamado por el reconocimiento de los militares como víctimas de graves violaciones a los Derechos Humanos; su dignificación es un paso pendiente en el camino de la paz, la reconciliación, reparación integral, y no repetición, para la construcción de tejido social en Colombia.