Antigua y Barbuda, junio de 2025.
Llegamos con el corazón lleno de memoria y la convicción intacta.
Como Corporación MilVíctimas, hemos asumido la responsabilidad de representar, ante las Américas, la voz de quienes han sufrido las consecuencias más duras del conflicto armado colombiano.
Estar presentes en la 55ª Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) no es un acto protocolario. Es un acto de justicia. Es la oportunidad de visibilizar, ante la comunidad internacional, que en Colombia todavía hay heridas abiertas, familias buscando respuestas y comunidades reclamando el derecho a vivir en paz.
Nuestra participación en el Diálogo de la Sociedad Civil y los Jefes de Delegación reafirma nuestro compromiso con una causa que va más allá de nuestras fronteras: la defensa de los derechos humanos, la verdad, la reparación integral y la no repetición.
No venimos solos. Nos acompañan los rostros, los nombres y las historias de miles de víctimas que han encontrado en nuestra organización un espacio de escucha, orientación, apoyo y lucha. Estamos aquí para que su voz traspase fronteras y para que su historia haga parte de las decisiones políticas que marcarán el rumbo del continente.
Creemos firmemente que los escenarios internacionales deben estar abiertos a las víctimas. Porque sin ellas, no hay democracia completa. Porque sin justicia, no hay paz duradera.
Desde Antigua y Barbuda, reafirmamos nuestra misión: seguir siendo puente entre las víctimas y las instituciones; seguir defendiendo la dignidad de quienes han sido vulnerados; seguir construyendo memoria para que nunca más se repitan las violencias que nos han marcado.
Seguiremos alzando la voz. Seguiremos presentes. Seguiremos luchando.
Corporación MilVíctimas
Por la verdad, la justicia y la reparación.