Como parte de la conmemoración del Dia Nacional de los Derechos Humanos, la Corporación MilVictimas, en una investigación que tomo como fuente cifras oficiales aportadas por el Comando Conjunto Estratégico de Transición, halló datos alarmantes sobre el crecimiento de casos de violaciones de Derechos Humanos a miembros de las Fuerzas Militares en los últimos años y en especial, aumento de actos terroristas perpetrados por miembros de las disidencias de las Farc, que desestabilizan y van en contra de la paz firmada en los acuerdos.
Militares víctimas de asesinato
A pesar de las operaciones militares que de manera constante intentan contener y frustrar las acciones criminales de los grupos armados organizados, los asesinatos a miembros de la Fuerzas Militares continúan siendo un hecho recurrente, que viola el Derecho a la Vida de los uniformados.
Entre el 2019 y el 2021, 168 miembros de las Fuerzas Militares fueron asesinados, 51 de ellos por acción de minas antipersona, 14 por francotirador y 12 en el denominado ´plan pistola´. Los militares asesinados restantes, corresponden a muertes en combate, hostigamientos y personal muerto en labores de inteligencia. De estos asesinatos, 94 fueron perpetrados por integrantes de las Disidencias de las Farc que se apartaron del acuerdo.
A su vez, en este lapso, en medio de las operaciones militares, 781 uniformados han resultado heridos por ataques de grupos armados.
Departamentos afectados por el crimen
Los departamentos en el país que mas han representado un peligro para la vida de los uniformados son en su orden: Norte de Santander con 248 acciones criminales en contra de la Fuerza Pública, Nariño 129, Arauca 107, Antioquia 70, Cauca 37 y Guaviare con 23 hechos en contra de los uniformados.
Disidencias de las Farc en el territorio
Gracias a las fuentes de financiamiento producto del narcotráfico, corredores de movilidad y facilidades para esconderse en Venezuela, las disidencias de las Farc han venido organizándose en más de 20 estructuras que, aunque pequeñas en su composición, logran hacer daño a la seguridad de la población civil y a las tropas que protegen el territorio.
En el territorio nacional delinquen de la siguiente manera, en el Caquetá se agrupan las estructuras 1, 62 y Miller Perdomo. En el Meta y Guaviare por su parte, las estructuras 40, 7, Armando Ríos y Jorge Briceño, son las responsables de las afectaciones en la zona. En Nariño y Cauca, la Dagoberto Ramos, Carlos Patiño y la estructura Jaime Martínez, han sido las encargadas de generar acciones terroristas que atentan contra las tropas y en el Norte de Santander el frente 33 ha estado al frente de hechos criminales.
Uso de minas: medios y métodos de guerra ilícitos empleados por las Disidencias de las Farc
Los militares aún siguen siendo víctimas de esta práctica ilícita, rechazada por el DIH. Entre el 2019 y el 2021, 184 militares han sido victimas de estos artefactos explosivos instalados por grupos armados, 51 de ellos perdieron la vida en el hecho.
Los grupos armados incluidas las Disidencias de las Farc, continuaron con la utilización de minas antipersona aun siendo este un crimen de guerra y una grave infracción al Derecho Internacional Humanitario, causando más víctimas entre las tropas, sumadas a las ocasionadas en el marco del conflicto armado y que aun siguen a la espera de ser priorizados en la Justicia Especial para la Paz, para así lograr acceder a verdad, justicia y reparación.
Con esta práctica perversa las disidencias de las Farc violan el principio de distinción, base del DIH, así como también el Principio de Limitación, utilizando métodos y medios que no son permitidos por el Derecho de la Haya.
Violaciones a los derechos humanos
Desde el 2016, los militares continúan siendo victimas de violaciones e infracciones a sus derechos humanos y al Derecho Internacional Humanitario. Los uniformados siguen, a pesar de la terminación del conflicto en el 2016, siendo blanco de hechos victimizantes tales como secuestro, tortura, amenaza, desplazamiento forzado entre otros. En lo corrido de estos años, 14.279 miembros de las Fuerzas Militares han sido víctimas, los hechos como amenaza, con 3.494 víctimas y desplazamiento forzado con 3.988, son los más recurrentes entre los uniformados que se ven vulnerados en su dignidad y derecho a la vida.
El secuestro también ha sido una practica victimizante empleada por los grupos armados. Desde el 2016, 23 uniformados han sido privados de su libertad y 6 de ellos sometidos a tortura.
Recientemente las disidencias de las Farc asesinaron al subteniente Cristian Calderón, quien se encontraba en estado de indefensión, desarmado y vestido de civil, en una grave infracción al DIH y al respeto a la vida de los integrantes de la Fuerza Pública.
Un llamado a los organismos garantes del acuerdo de paz y a los mecanismos del Sistema Integral
La Corporación MILVÍCTIMAS hace un llamado enfático a los organismos y países garantes de la implementación de los acuerdos, para que rechacen y definan acciones de respaldo a los militares víctimas, quienes antes y posterior a la firma de los acuerdos, continúan siendo los principales blancos de ataques indiscriminados por grupos armados organizados y por quienes desde el grupo armado de las FARC, decidieron continuar con las armas y no acogerse a lo pactado.
Que el día Nacional de los Derechos Humanos sea la oportunidad para hacer un llamado por el reconocimiento de los militares como víctimas de graves violaciones a los Derechos Humanos; su dignificación es un paso pendiente en el camino de la paz, la reconciliación, reparación integral, y no repetición, para la construcción de tejido social en Colombia.